Uvepé
Si uno camina, paso a paso, hacia la zona de playas de Santander, una vez que se deja atrás Puerto Chico, el Palacio de Festivales, el Museo Oceanográfico…, se llega primero a la altura de la Playa de la Magdalena, y antes la de los Peligros, algo más allá está el monumento dedicado a Gerardo Diego, y poco más adelante el de Jorge Sepúlveda, que, claro, mira al mar. Al otro lado de tan espléndida bahía se alzan las montañas, a veces con nieve, otras brumosas, y en muchas ocasiones, con niebla en las cumbres.
Así se llega a la altura de la península de la Magdalena, en la que sobresale el Palacio, a sus pies la Playa de Bikinis, enfrente de la que se encuentra la Isla de la Torre, que alberga la escuela de vela. Superado el cruce que nos llevaría a la península el caminante llega otra playa, la llamada del Camello, si continuamos el paseo por la Avenida de la Reina Victoria y justo en el cruce de la Magdalena hay un jardincito, muy cuidado, con coloridas flores, y en él una estatua monumental, más que de tamaño natural, parece de un marino, su gorro, ropaje y botas de agua parecen indicarlo. No es necesario fijarse mucho para ver que en su mano izquierda sostiene un libro, en la derecha una pipa.
Este monumento está dedicado a José del Río Saínz, conocido también por “Pick”, su pseudónimo más utilizado. Nació en Santander, en 1.884, estudió náutica, profesión que ejerció hasta 1.936, a partir de este año se dedicó de lleno al periodismo, que ya había ejercido antes, compatibilizándolo con su trabajo de marino.
Fue corresponsal en la Guerra de Marruecos. Sus artículos se publicaron en varios diarios de Santander, tales como “Alerta”, “El Cantábrico”, “La Gaceta del Norte”, o “El Diario Montañés”, entre otros, también en periódicos de Madrid como “ABC” e “Informaciones”. También fue autor de una extensa obra poética, recogida en varios libros como “Versos del mar y de los viajes”, o “Poemas de la costa”.
Fue nombrado socio de honor del Ateneo de Santander, y Periodista de Honor, nombrado por la Federación Nacional de Asociaciones de la Prensa de España, entre otras distinciones recibidas.
Falleció en Madrid en 1964.
La escultura en bronce de José del Río Saínz, marino, poeta y periodista, es obra del escultor José Villalobos y Miñor.
Se puede, y seguramente se debe, continuar el caminar hacia las dos playas del Sardinero, pasando antes por la de la Concha, y refrescarse en alguno de los bares que encontraremos en la ruta, o en una de las variadas terrazas al pie del Casino, pero seguro que una vez descubierta esta escultura, uno siempre se fija en ella y en su pipa, incluso, aunque se pase en autobús o en coche; en alguna ocasión volverá el caminante a hacerle una visita y echar una pipa en su compañía, entonces, es posible que, como a este paseante en cortes, se le pase por la cabeza ponerle en la solapa una insignia, o pin que dicen ahora, del CAP Madrid, en estas ocasiones siempre es saludable tener cerca unos ojos cargados de mar que le digan eso de ¡estás loco!, y le hagan continuar el camino.
23/06/2007